
El viernes recién pasado se celebró en la universidad la apertura del
Encuentro Estudiantil, una instancia que en lo posible permitirá a los estudiantes de la UC definamos políticas estudiantiles de largo plazo que guíen a la federación transversalmente a los largo de los años independiente de la lista ganadora. En este contexto me invitaron a aportar con la visión que me dio estar un año en la
FEUC, para dar el puntapie inicial a este encuentro. A continuación transcribo mi discurso:
"Primero que todo quiero agradecer la invitación que me han hecho a esta ceremonia de apertura del Encuentro Estudiantil y dado que ustedes son los protagonistas de esta actividad quisiera desearles mucha suerte en las discusiones que se avecinan y esperando sobre todo que el trabajo sea fructífero. Dado entonces que no soy representante, entiendo que mi presencia acá se justifica para aportar una visión basada en la experiencia de mis años en la política universitaria, y particularmente en el equipo de la FEUC del año pasado.
"Si bien este tipo de encuentros se ha desarrollado en el pasado, la motivación de hacerlos ha perdurado durante los años debido en gran medida a que las experiencias anteriores no han satisfecho la necesidad de participación de los estudiantes. Ustedes no tienen porque cargar con los errores del pasado, sin embargo hoy está en sus manos hacer que este encuentro tenga un final distinto a los anteriores, deben depositar todas sus energías, experiencias, visiones y empeño en que esto resulte y se transforme en nuevas políticas validadas por los estudiantes y para los estudiantes, la universidad y el país.
"El año pasado los estatutos de la Federación fueron transformados medularmente en un plebiscito histórico donde más de la mitad de nuestros compañeros aprobaron la nueva institucionalidad de nuestra Federación. Para la federación del año pasado ese fue quizás el logro más importante, imagínense que la estructura de los estatutos no había cambiado desde el año 1985, cuando nuestra FEUC retomó su veta democrática, pero es imposible disociar la creación de estos estatutos con la época que estaba viviendo el país y la Universidad, en plena dictadura y con un rector designado que comenzaba a abandonar sus funciones, no es de extrañar entonces que dichos estatutos fueran en extremo precarios en términos de participación y democracia, debido a las concesiones que debieron hacerse, pero dichas concesiones e imperfecciones que se suponían debieran ser pasajeras se instalaron y marcaron la marcha de la federación por 20 años.
"Con el plebiscito del año pasado comenzamos un camino democratizador en las instituciones estudiantiles, con mayores y mejores instancias de participación, llevando la toma de decisiones hasta las bases y los representantes territoriales, legitimando al consejo de presidentes como el órgano soberano de representación, y exigiendo que la elección de consejero superior sea con mayoría absoluta y especificando sus atribuciones a ver si por fin descubrimos qué hace el consejero superior.
"El camino recién comienza y presenta nuevos desafíos para seguir avanzado, cómo lograr la real incorporación de todos los estamentos universitarios a su proceso de toma de decisiones o la participación de los estudiantes en la elección de autoridades. Este mismo encuentro es otra expresión en búsqueda de la participación, la cual debe gestarse por convicción y no por imposición pero también debe facilitarse. La vergonzosa votación del día miércoles y jueves, no refleja el desinterés de nuestros compañeros por participar, sino que los temores de quiénes desinforman y ya se han hecho su parcelita dentro de los movimientos políticos de la universidad y ven amenazada su permanencia y su poder por la irrupción de los estudiantes de base. Si nos comprometemos con la participación se debe ser consecuente con cada una de las acciones que se emprenden para que esto ocurra: me parece un contrasentido hacer un encuentro estudiantil para alentar la participación y al mismo tiempo discutir si este debiera ser cerrado, esto atenta y contraría completamente la naturaleza misma del encuentro.
"Aún así la oportunidad de hacer un buen trabajo prevalece, y está en las manos de cada representante hacer la diferencia entre representarse a él mismo, o representar los intereses de sus compañeros, de las mayorías, y también resguardar los derechos de las minorías. Yo los llamó a tener la fuerza para convertir a este encuentro, en una política institucional de la federación, para que no sea un esfuerzo esporádico y descontinuado en el tiempo, sino que se norme su realización cada cierto tiempo, y sus decisiones sean plebiscitadas y vinculantes para la Federación, sólo de esa manera podremos asegurar que efectivamente las decisiones que nos afectan a todos, las decidamos entre todos, y cada estudiante mediante su voto pueda presentar su opinión y ninguno valga más que otro.
"En la actualidad nuestra federación lamentablemente carece de políticas de largo plazo, lo que atenta contra la seriedad de la institución y la continuidad de los buenos proyectos, esto es tan palpable que incluso carecemos de una imagen, de un logo que nos identifique, cada federación muchas veces debe partir de cero e intenta imprimir un sello característico a su gestión, pero el resultado es una federación que se construye a impulsos que duran un año y carente de identidad. Y quedamos sujetos no solamente al programa de la lista ganadora, sino también a la voluntad, las opiniones y los caprichos de su directiva.
"Resulta trascendental que los estudiantes agrupados y representados por la FEUC tengan opiniones y propuestas sólidas y sostenibles en el tiempo frente a la universidad, el país y otras federaciones. Y esta es precisamente la instancia para que esto ocurra, de este encuentro y de los que se realicen en el futuro es necesario que emanen posturas, visiones y proyectos validadas por los estudiantes que sean transversales a las federaciones de turno, independiente de su color político y que la federación entienda como su obligación promoverlas y desarrollarlas. De esta forma la participación de la FEUC en la Confech será más clara y tendrá más consistencia, así como también sus interlocuciones con el gobierno y además dichas propuestas podrán ser integradas en el plan estratégico de la universidad. Adicionalmente será mucho más fácil para los estudiantes fiscalizar que la federación vele por sus intereses.
"En consecuencia el resultado del proceso que hoy comienza y de las futuras reformas democratizadoras deben traducirse en mayores instancias de participación y en una Federación de estudiantes cuyo programa no sirva a los intereses de los movimientos políticos sino que sea una construcción de todos los estudiantes y que permita que las legítimas posiciones políticas estén en armonía con las posiciones de la mayoría
"Muchas gracias y mucha suerte."